El 17 de mayo de 2023, vivimos una experiencia inolvidable en nuestro primer shooting para Pamera, pero no exactamente por las razones que esperábamos. Lo que debía ser una mañana cálida y soleada se convirtió en una auténtica lucha contra el frío. A las 5 de la mañana, nos encontramos en la icónica carretera de Vallvidrera, conocida y amada por los ciclistas de Barcelona, con la misión de capturar el espíritu fresco y veraniego de nuestras camisas. Sin embargo, el verdadero protagonista de la jornada no fueron las camisas, sino el gélido amanecer que nos sorprendió.
Equipados con lo justo y sin prever que las temperaturas bajarían tanto, el frío se apoderó de nosotros desde el primer momento. Mientras nuestro equipo se reunía, los temblores y las quejas amistosas de los nueve amigos que se ofrecieron como modelos se convirtieron en el telón de fondo de la sesión. Las sonrisas a veces se congelaban, pero no dejamos que eso nos detuviera.
Nuestros amigos, quienes probablemente no se imaginaban lo que les esperaba, aguantaron como verdaderos campeones. Entre risas nerviosas y tiritonas constantes, logramos sacar adelante cada toma, aunque no sin antes “matar de frío” a más de uno. Las pausas para calentar las manos y los pies eran constantes, y cada racha de viento nos recordaba lo lejos que estábamos de ese clima veraniego que esperábamos.
A pesar del desafío, el ambiente fue increíblemente divertido. Nos unió la camaradería que surgió al enfrentar el frío juntos, y, entre bromas y complicidad, logramos capturar imágenes que no solo reflejan la esencia de nuestras camisas, sino también el espíritu de Pamera: una marca que sabe disfrutar del camino, incluso cuando el clima conspira en nuestra contra.